La historia de la joven de Monterrey, Nuevo León, que se volvió viral tras salir a la calle vestida de novia para denunciar a un organizador de eventos por presunto fraude, dio un giro. Usuarios de redes sociales identificaron a la joven y acusan a su futuro esposo de estafar personas.
En los carteles que portaba la novia, se leía un mensaje directo: «Fernando, regrésame todo lo que te di. Tienes hasta el 20 de marzo o subo tu foto», la afectada recorrió la avenida Concordia en Apodaca y el centro de Monterrey exigiendo la devolución del dinero.
De acuerdo con su denuncia, había pagado 200 mil pesos al organizador, identificado como Fernando, para la renta del salón y otros servicios de su boda, pero al intentar confirmar la reservación descubrió que nunca se había realizado. Además, el señalado dejó de responder sus llamadas y, al acudir a su domicilio, su madre le informó que ya no vivía ahí.
Este caso se volvió viral en redes sociales, generando indignación en contra de Fernando y apoyo hacia la novia, pero lo que parecía una historia de injusticia tomó un giro inesperado.
Como ya es costumbre, usuarios en redes comenzaron a investigar y descubrieron que el futuro esposo de la afectada, identificado como Martín Gámez, tenía un historial de fra…des inmobiliarios. Según la creadora de contenido Yuliana Martínez, «Martín tiene poco que salió del penal por fraude… debe más de 50 millones».
Las denuncias en su contra del novio, incluyen la supuesta venta de casas que nunca entregó e, incluso, el desalojo de una anciana de su vivienda sin haberle pagado un solo peso. La historia tomó otro nivel cuando algunas personas aseguraron que el organizador de bodas acusado de fraude podría ser nieto de una de sus víctimas.
«Ahora lo que empezó como una historia de empatía hacia la joven pareja… se está convirtiendo en una venganza aplaudida por muchos», mencionó un internauta.
Este escándalo, desató teorías sobre la veracidad del fraude denunciado por la novia. Algunos usuarios sugieren que podría tratarse de un montaje para generar simpatía y obtener ayuda de proveedores.
Por su parte, una usuaria en Facebook, Fanny Hurtado, escribió: «O, mi otra hipótesis es que no existe ningún Fernando wedding planner y el que la estafó con los 200 mil es su mismo prometido, porque de que los hay, los hay».